domingo, julio 08, 2007

La Esponja Informativa



La Redacción de la Esponja encontró esta imagen de hace muchos años donde se encuentra el S. Adrian C. y el direct de este blog...









  • f¿Quién se queda con su audiencia? De Monitor:

http://www.milenio.com/mexico/milenio/firma.php?id=526794

  • Actores de RCTV siguen adelante con el apoyo de sus televidentes:

http://www.el-nacional.com/canales/entretenimiento/TelevisionR.asp?ID=452


Había una vez Denisse Dresser

"¡Ya! Ni que fuera para tanto. No hicimos nada que tú no quisieras. ¡Ya! Deja de lloriquear y toma un juguete de los que hay en e] otro cuarto. Toma el que tú quieras. Mejor toma dos y ven para que sigamos jugando."

Jean Succar Kuri en Los demonios del Edén.


Había una vez un pederasta que estaba protegido por sus muy podero­sos amigos". Así se titula el desplegado que publicaron los cineastas Alfonso Cuarón, Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro. Y convocadas por ellos, miles de firmas más denunciando, condenando, exigiendo. Pidiéndole a la Suprema Corte de Justicia que defienda las garantías individuales de una ciudadana -Lydia Cacho-- cuando tantas otras instituciones de gobierno han rehusado hacerla. Exhortando a II ministros que revelen una verdad muy simple que por ello enfrenta las mayores resistencias:

México es un país de pederastas y de políticos que los encubren. México es un país donde las redes de pedófilos encuentran autoridades que las amparan. México es un lugar en el cual los ciudadanos tienen que pelear para que su gobierno los reconozca como seres humanos.

Seres humanos como una periodista quedes pliega día tras día la dignidad de la indignación. Que en lugar de resignarse ante la realidad de la pornografía infantil, decide exponerla en el libro Los demonios del Edén. Una crónica desgarrado­ra de lo que ocurre detrás de las puertas cerradas, en sitios como el condominio Solymar en Cancún, con la complicidad de gobiernos locales y la protección de políticos federales. Niñas violadas y niños acosados. Una chiquilla de cuatro años obligada a tener relaciones sexua­les con su hermano mientras Jean Succar Kuri graba aquello que les ha obligado a hacer. Menores de edad vendidos por sus padres y comprados por pederastas. El llanto y el dolor y la culpa y la impotencia que todo esto provoca. AlIí, retratado en 206 páginas cuya lectura devela lo que muchos quisieran negar y muchos harían cualquier cosa por ocultar.

Allí, desnudada por Lydia Cacho, la ex­plotación comercial del sexo con la anuencia de la clase política. En su libro, las 16 menciones de Emilio Gamboa Patrón, hoy coordinador parlamentario del PRI en la Cámara, de Diputados. Las 27 menciones de Miguel Angel Yunes, actual director del ISSSTE. Dos políticos prominentes, conocidos en Cancún por los negocios que han emprendido, los yates que han comprado, los contratos que han otorgado, los pederastas con los cuales han entablado amistad. Jean Succar Kuri se enorgullecía de ella, y una de sus víctimas lo recuerda: "Yo estuve con el Sr. Miguel Angel Yunes y con el Sr. Emilio Gamboa Patrón en una comida. Johny (Jean Succar) me llevó con él a un restaurante muy elegante en ]a Avenida Insurgentes, donde fueron llegan­ do varios señores. Me saludaron con mucha amabilidad. Cuando ya iban a hablar de ne­gocios, Johny me mandó a que fuera a pasar un par de horas en un centro comercial. Nun­ca olvidaré que Yunes me miró muy sonriente y gentilmente me dio un billete, creo que eran cien dólares, me impresionó mucho. Me dijo que me comprara un vestido muy bonito".

Un pederasta rodeado de amigos influyentes como el llamado Rey de la Mezclilla -Kamel Nacif-, con 23 menciones en el índice onomástica de una obra que lo coloca de espaldas contra la pared. El que le habla a su amigo, el gobernador de Puebla, para que lo ayude. El que compra a las autoridades en Cancún para que lo apoyen. El responsable del rapto de Lydia Cacho y su traslado ilegal desde Quintana Roa hasta Puebla. El que la tilda de loca por no quedarse callada.

El que se refiere a los periodistas como "hijos de la chingada" o "perros". El que le pide a Emilio Gamboa que evite la apro­bación de una ley para "hacer juego" en el Hipódromo, diciéndole: "dale pa'tras, pa­pá", y el priista le contesta: "pos entonces va pa'trás ... esa chingadera no pasa en el Senado". El que afirma estar cansado de las "asquerosidades" de Lydia Cacho, quien tan sólo ha aireado las del textilero.

Y el que durante tanto tiempo supuso que se saldría con la suya. Porque quienes aplas­tan a las personas y las postran, piensan que han adquirido el derecho a hacerla a perpetuidad. Porque el Congreso de Puebla está controlado por Mario Marín y jamás iniciaría un juicio político en su contra. Porque el PRI insiste-hasta la fecha-en apoyar al gobernador acusado, aunque las pruebas recabadas subrayan su culpabilidad. Porque personas como Beatriz Paredes minimizan lo ocurrido y se refieren al comportamiento condena­ble del góber maloso como un "lamentable error". Porque después de condenar a Marín en su campaña presidencial, ahora Felipe Calderón ha procurado tomarse una foto con él. Porque los policías y los jueces y los procuradores a lo largo del país rutinariamente violan las garantías individuales de los ciuda­danos sin el menor reparo o el menor rubor. Y porque, como afirma el desplegado convocado por Alfonso Cuarón, no es fácil reunir la fuerza necesaria para acusar a los hombres ricos e influyentes. Esos que perciben al país como su feudo particular y lo tratan como tal. Esos demonios sueltos por el edén con sus dos botellas de cognac en la mano.

Los que ahora -como Mario Marín- declaran que no han cometido ningún delito y se encomiendan a Dios. Rehúyen. Niegan. Obstaculizan. Rezan. Pero las pruebas de lo que hicieron persisten. Las huellas dactilares en la escena del crimen subsisten. En cada conversación grabada, en cada investi­gación realizada, en cada pesquisa que la co­misión investigadora de la Suprema Corte se ha empeñado en llevar a cabo. La voz inconfundible del gobernador, vanagloriándose, cuando le cuenta a su amigo Kamel Nacif:

"Pues yo ayer le acabé de dar un pinche coscorrón a esta vieja cabrona". Con el aval de los procuradores de Quintana Roo y Puebla. Con el espaldarazo de la juez que ordenó la captura. Con el aplauso del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Puebla. Conductas comparti­das que violan las garantías individuales de Lydia Cacho y de cualquier persona que participa en las grandes luchas del país, armada únicamente con los sables de la verdad.

Verdad que la Suprema Corte, como garante de la Constitución, tiene la obligación de defender. De promover. De ga­rantizar. Como una institución cada vez más presente en la transición democrática, haciendo historia e incidiendo en su devenir. Capaz de vislumbrar el horizonte de una democracia plena y cómo llevar a México hasta allí. Capaz de entender su papel en la nueva era y cómo desem­peñarlo para defender los principios de la Carta Magna, pisoteados en este caso y en tantos más. No extralimitándose, como sugieren quienes la quisieran des­acreditar, sino dándole vida a algo que ha estado moribundo durante décadas: la noción de que el gobierno existe para representar a los ciudadanos y no para exprimirlos. La idea de que no puede haber seguridad para los derechos perso­nales o políticos de cualquier persona en una comunidad, cuando los derechos de una sola persona son ignorados. El punto de partida de cualquier discusión en el Máximo Tribunal: La Constitución fue creada para proteger las garantías indi­viduales de los ciudadanos, y la Corte existe para asegurarlas.

Lydia Cacho lo entiende. Los firman­tes del desplegado contra la impunidad lo reiteran. Le piden a la Corte que actúe porque ninguna otra institución lo ha querido hacer: ni el Poder Judicial ni el Congreso ni el Presidente ni los partidos políticos. Y por ello los ciudadanos se ven obligados a emprender acciones contra distintas instancias gubernamen­tales que pisotean en lugar de proteger. Se ven obligados a rogarle a la Corte que le otorgue sentido democrático al texto constitucional y desempolve palabras viejas para adecuarlas a tiempos nuevos. Se ven obligados a suplicarle a la Corte que ayude a desmantelar las redes -po­líticas y pornográficas- que Lydia ha descrito. A sabiendas de que sólo tienen derechos quienes están dispuestos a pe­ lear por ellos. Como hay que pelear hoy en favor de 20 mil niños victimizados y en contra de quienes solapan a sus victi­marios. Para poder decir: "Había una vez un pederasta que fue castigado junto con sus muy poderosos amigos" .•

De PROCESO, No. 1599, 24 de junio 007.

  • "Descubren una corriente de estrellas que se precipita sobre la Vía Láctea":

http://www.elmundo.es/elmundo/2007/07/06/ciencia/1183722579.html


  • Sobre José Gutiérrez Vivó:

http://www.eluniversal.com.mx/columnas/66052.html

En la PGJDF, lo peor del salinismo: Diego y Lozano:

  • "En la PGJDF, lo peor del salinismo: Diego y Lozano":

http://www.jornada.unam.mx/2007/07/07/index.php?section=opinion&article=004o1pol


  • "El gobierno de Calderón oculta la verdad al pueblo, afirma abogado de Ye Gon en EU":

http://www.jornada.unam.mx/2007/07/06/index.php?section=politica&article=005n1pol


  • "Slim, el más rico del mundo: Sentido Común":

http://www.economista.com.mx/articulos/2007-07-03-39731

Pulpo abre botella con sus tentáculos


  • "Pulpo abre botella con sus tentáculos":

http://www.terra.com.mx/articulo.aspx?ref=0&articuloid=286325


En busca de un Dios
Guillermo Fadanelli

¿Qué puede hacer un hombre que carece de dioses? Quiero decir: ¿qué va a hacer durante el tiempo en que está muerto? Se me dirá que hará lo mismo que hizo antes de nacer, pero me seguiré sintien­do incómodo. En estos tiempos en que las decisiones personales las deja uno en manos de expertos, sería bueno saber qué dicen los especialistas al respecto de la eternidad. Hacerse cristiano de la noche a la mañana no es un buen camino, porque para mí la historia bíblica, las parábolas divinas y todo lo que concierne a los relatos judaicos o cristianos se ubican más bien en terrenos de la literatura.

Y tomando esto en cuenta me niego a ser cris­tiano porque he leído mejores libros que la Biblia. En todo caso podría ser cervantista y adorar al Quijote, pero no me despierta veneración religiosa y no me veo considerando sagrados aquellos mesones donde el de la triste figura se restauraba de las heridas que le causaban sus constantes aventuras. Si fuera una lechuza es evidente que mi dios sería también una lechuza, aunque rodeada de un aura sagrada de la que carecemos las lechuzas comunes. A los ojos del tonto Dios también lo es, pues los tontos no tolerarían a un dios que se pasara de listo. Tontos, lechuzas, cristianos todos ellos veneran a dioses que se les parecen, ¿pero qué clase de dios sería uno que se pareciera a mí? Me niego a venerar a un dios cínico y que trabaja sólo de vez en cuando. De hacerla mi tranquilidad eterna quedaría en entredicho: soy un dios en el que no se puede confiar. En lo que respecta a los dioses del panteón azteca no me une a ellos ningún vínculo sagrado. Los aztecas son un pueblo que me desagrada profundamente: servil con los poderosos e implacable con los débiles. Las cascadas de sangre que se deslizaban en las escalinatas de sus templos son el símbolo de su ser sanguinario y cobarde. Espero no encontrarme a Huitzilopochtli en ningún rincón de la eternidad.

Una salida airosa a mi rancio ateísmo sería dar por verdadero el eterno retorno: viviré la misma vida duran­ te toda la eternidad, escribiré este artículo infinitas veces mientras el tiempo no se detenga. No sé hasta qué punto me reconforta repetir eternamente una vida que se ha cimentado sobre un costal de errores, pero lo prefiero a orar junto a los cristianos. Después de desechar el budismo en sus tan diversas corrientes, creo que la reencarnación podría ser un destino amable. Encamar en un ser que nacerá en el futuro y que seré yo mismo en otra circunstancia. No me atrae la idea de reencarnar en ani­males o en plantas, sino en seres humanos, lo que quiere decir es que no he aprendido nada de la vida. A estas alturas debería estar harto de los seres humanos, pero la sola esperanza de que en el futuro me acostaré con otras mujeres me hace desear la reencarnación. Hasta ahora no he recibido oferta más tentadora.

De DÍA SIETE, No. 360, 01 jul 007.

12 comentarios:

Esponja Informativa dijo...

Pues el Consejo de la Esponja Informativa al menos convoca a una reunión a puerta cerrada, principalmente entre los Ss. Adrian, Alí y su servilleta para aprovechar esos pomos, y ya el que se quiera apuntar bienvenido.
Así que vayan estableciendo fecha, horarios, etc.

Anónimo dijo...

Pues como dijera la canción "el mundo se va a acabar, si hemos de beber nos debemos de apresurar!!!" A partir de este fin estoy disponible de 21 hrs de viernes a las 9 hrs de domingo. Sede: donde sea por mí está bien.

Saludos¡
Peleador sin ley

Anónimo dijo...

No san cabrones, yo voy a estar en chinga mudándome este fin… y sí, a puerta cerrada, jeje.

adrianonxx

Esponja Informativa dijo...

El S. Adrian ya está huyendo pa q no lo encuentren las autoridades, je.
Y cuándo terminas de mudarte Adrianonxx?

Anónimo dijo...

Pues yo traté de localizarle por medios diversos pero nanainas que responde al llamado del pomo, quizá de verdad ya se encuentrá en cuba disfrutando de un matusalén, lejos de la justicia...

Tendré el privilegio de echarme ese pomo con el director de la esponja, quizá se muestre interesado por mis acciones del ojo de la hormiga...

Peleador sin ley.

Esponja Informativa dijo...

Pues Mr. Alí J., yo puedo después de este lunes 16, cualquier día (martes, miér, jueves, viernes...) y después de las 2 pm.
Y pues estaría bien empezar a comprar a los demás blogs para armar un monopolio de blogs... está más que visto que los monopolios lo hacen millonario a uno.

Saludos

Anónimo dijo...

pos el viernes en la noche!!!!!!!

adrianonxx

Esponja Informativa dijo...

Pues va quedando pal viernes 20 en latarde-noche, qué opina S. Ali?

Saludos

Anónimo dijo...

órale, pinche parcero!!!!!!!

Anónimo dijo...

No se diga más, queda para el viernes 20. Mejor porque este viernes es 13, no se vayan a aparacer en la reunión a puerta cerrada los otros dos sospechosisimos perdidos... jejejojo.

Saludos!

PD: y dónde?

Anónimo dijo...

dónde, director?

Esponja Informativa dijo...

Pues podría ser en La Alameda Central, ahi en el Hemiciclo a Juárez; o en el Río de Plata; o en la Plaza de la Constitución; o conocer el nuevo escondite del S. Adrian; donde sea puee!

Saludos